WELCOME BLACK FRIDAY
El Black Friday español es una moda importada (al igual que otras muchas) directamente de los Estados Unidos. Su traducción es viernes negro. Ambas palabras viernes y Friday provienen del latín Veneris dies que significa “día de Venus”. Los días de la semana en inglés se escriben con letra mayúscula, motivo por el cual escribiremos Friday con mayúscula. Debido a nuestra tendencia insólita a prohijar términos extranjeros, especialmente anglosajones, como si nuestra hermosa lengua careciera de voces suficientes para poder entendernos, hemos adoptado el término tal cual, en este caso, algo infrecuente, con una pronunciación inglesa bastante aceptable. Así pues, desde 2013 comenzamos a oír y ver “Black Friday” en todos los medios, expresión mágica, indicadora del arranque de ese torrente arrollador que son las compras navideñas ¡y a precios de ganga! que es lo bueno. El comercio vende más, los consumidores ahorramos un montón, y todos contentos y satisfechos, como debe ser. Estamos hablando exactamente del último viernes de noviembre de cada año. Al parecer este término comenzó a fomentarse en Estados Unidos a partir de 1966 El origen del adjetivo negro que califica a este viernes no está bien definido, ya que existen al menos dos teorías que podrían justificarlo. Algunos creen que debido a la aglomeración de compradores en esos días, la policía debía emplearse a fondo para mantener el orden. Alguno de los agentes, harto hasta el gorro, dirigiéndose a un compañero, pudo decir: “Hey White, what an awful black day!”. (¡He White, vaya día negro tan horrible!). Otros opinan que negro hace referencia a los números negros (beneficios) que los comerciantes estaban obteniendo debido a las muchas ventas, en oposición a los números rojos que tradicionalmente indican pérdidas, hablando en lenguaje contable.
Se da la circunstancia de que el día anterior al que comentamos, es decir, el último jueves del mes de noviembre de cada año, los norteamericanos celebran su día de acción de gracias o Thanksgiving day, fecha importantísina para ellos, posiblemente más que el día de Navidad. Cierran los colegios y la mayoría de los centros oficiales, lo cual se extiende, en un largo fin de semana, hasta el domingo siguiente. Como su nombre indica, el objetivo moral de la fiesta es dar las gracias por todo aquello que poseen: salud, familia, amigos, éxitos conseguidos... Por el día suelen celebrarse desfiles y otros vistosos actos festivos, pero la culminación de la fiesta es una suculenta cena familiar, la más importante del año, en la que el pavo relleno es el plato principal. (No hay que olvidar que esta ave es de origen americano). Se trata de una histórica tradición cristiana iniciada en 1623. Este año, tras la recolección de la cosecha, el gobernador de la colonia de “peregrinos” (primeros colonos) en Plymouth, Massachusetts invitó a las familias a concentrarse en la casa comunal para escuchar al pastor y dar gracias a Dios por todas sus bendiciones. Plymouth es el lugar donde se fijó el primer asentamiento permanente en Nueva Inglaterra en 1620. Algunos historiadores creen que ya en 1621, los emigrantes ofrecían a los nativos cenas de agradecimiento por enseñarles técnicas de caza y cultivo de las tierras. Años más tarde, en 1795, el primer presidente de los E.U.A., George Washington, (1789-1797), proclama en 1795 el día nacional de acción de gracias. Fue Abraham Lincoln, decimoxesto presidente, (1861-1865) quien en 1863 estableció como fecha de esta fiesta el último jueves de noviembre. Más recientemente, el presidente Bush añadió una curiosa costumbre nueva relacionada con los pavos, la cual sigue en vigor. Consiste en perdonarle la vida a uno de los pavos que se habían elegido para consumirse en la Casa Blanca. Este acto ha cuajado de tal manera en la sociedad americana que todo el mundo ansía conocer al afortunado animal. La noticia es ampliamente difundida por todos los medios de comunicación americanos, llegando incluso a conocimiento de otros muchos países del mundo.
¿Acabaremos los españoles importando también nuestro Thanksgivig day español, con idéntica grafía, por supuesto?
José María Serrano
Noviembre 2016.
